Páginas

domingo, 17 de mayo de 2015

Pico Le Bondidier (08-04-2014)

A pesar de que el pasado verano tampoco es que hiciéramos tantas salidas y a pesar de haber perdido gran parte de los datos cuando mi viejo ordenador dijo que ya no podía más, todavía me queda alguna que otra ascensión del pasado año por contar en el blog.
Barranco del Alba, acercándonos al Plan de Paderna.
En este caso le toca al Pico Le Bondidier, el único pico de más de tresmil asequible en la zona del extremo Noroeste del macizo que nos faltaba por subir. Aunque hemos ido por allí bastantes veces, siempre nos quedaba pendiente, así que como buenos tachamontes volvemos una vez más al Collado del Alba (zona tranquila y poco transitada, bonitas vistas...no importa volver) y lo eliminamos de la lista.
Pico Le Bondidier, entre la niebla, desde el Collado Cordier...
...y desde algo más lejos, desde el Pico del Alba, en un día de menos nubes. Casi no destaca a la derecha de la foto, por las moles del fondo (Cordier, Maladeta...).
Fecha: 04-08-2014
Montañeros: 2
Recorrido: La Besurta (1.945 m)- Refugio de la Renclusa (2.140 m)- Plan de Paderna (2.240 m)- Collado del Alba (3.081 m)- Collado Cordier (3.121 m)- Pico Le Bondidier N (3.153) - Pico Le Bondidier (3.185 m). Vuelta por el mismo camino.
Distancia (Ida y vuelta): 13,53 km
Desnivel (positivo): 1.488  m
Duración (con paradas): 8 h 30 min
Dificultad: Moderada. Nevero, permanece durante gran parte del año, con mucha pendiente  (crampones necesarios) en el acceso al Collado del Alba. Trepadas por buen granito en la cresta hacia la cima con pasos de II- . (P.D. o F+ según las guías)   
Track en wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8423499

Salimos desde La Besurta, a donde llegamos en autobús desde el vado del Hospital. Tomamos el marcado sendero hacia el refugio de la Renclusa. Son más de las ocho y media cuando salimos, así que poca gente sube hacia la Renclusa. Incluso el Refugio está tranquilo cuando llegamos unos 45 minutos después. Si fuese otra hora hablaría de las colas hacia el Aneto pero a esta hora apenas nos encontramos gente que deja el refugio camino de la Besurta y poco más.

Llegados al refugio cruzamos el Torrente de la Renclusa por una pasarela y continuamos por un marcado sendero, dejando el torrente del Alba a nuestra izquierda, hacia el Plan de Paderna.Tras una corta subida por sendero marcado llegaremos a una zona llana donde volveremos a cruzar el torrente por una nueva pasarela. Dejando ahora el curso de agua a nuestra derecha llegaremos al Plan de Paderna (2.270 m; 1 h).

Unos pocos metros sobre nosotros, a nuestra izquierda, el ibón de la Renclusa. Desde donde estamos ni se intuyen (nos han llegado a preguntar en el mismo sendero por ellos), pero si hay tiempo merece la pena acercarse y si no es ahora, a la vuelta siempre es un magnífico sitio donde descansar.

El sendero continua con el Plan de Paderna y sus meandros a nuestra derecha. Vamos subiendo hacia su cola, pegados a la pared de nuestra izquierda.

Junto al refugio, miramos la pasarela que tenemos que cruzar. El camino seguirá subiendo unos metros paralelos al torrente para luego girar a nuestra derecha, ascendiendo con el torrente del Alba a nuestra izquierda (hitos y senda)

Refugio de la Renclusa, visto desde la subida al Plan de Paderna.
Nos acercamos a la zona donde cruzar de nuevo el torrente. La subida se suaviza y al fondo se empieza a mostrar el recorrido del día.
Hemos cruzado por la pasarela de troncos y continuamos por el sendero.
Plan de Paderna. Lo dejamos a nuestra derecha.
El enclave del Plan de Paderna es de los que merece la visita. Pino negro, roca, agua dibujando meandros, a veces flores, marmotas jugando en la hierba,...Aquí lo vemos según seguimos ascendiendo.
Se suaviza la pendiente. Frente a nosotros el Barranco del Alba. El camino girará primero unos metros a nuestra izquierda para internarse en el caos de roca siguiendo hacia la zona central que vemos en la foto.
Cuando la subida vuelve a suavizarse salimos a un caos de rocas. A nuestra izquierda el Barranco del Diente y todo el caos de rocas que desciende de la zona de la Madaleta. Frente a nosotros sigue el Barranco del Alba. Cruzamos el caos de rocas, yo diría que en ligera bajada, siguiendo los hitos, cruzamos una pequeña zona llana llena de pequeños cantos redondos y nos acercamos al arroyo que desciende frente a nosotros por la ladera herbosa (Suroeste). A nuestra derecha, las palas que bajan del Pico de Paderna.

Seguimos el sendero que asciende (aquí empieza la cuesta de verdad) primero dejando el arroyo a nuestra izquierda para unos metros más arriba cruzarlo y seguir por la zona herbosa, más practicable.

El sendero se va yendo poco a poco a poco a la izquierda, hasta alcanzar el escalón de roca. Aquí gira a nuestra derecha (Oeste), por una amplia repisa, dirigiéndose hacia la arista que se dirige al Pico de Paderna.

Tras salir a la arista (2.570 m; 1 h 45 min), el sendero la deja a nuestra derecha y vuelve a retomar la dirección inicial (Suroeste). Frente a nosotros una loma que alterna canchales, zona herbosas y algo de piedra suelta. seguimos el sendero que, con pequeñas variantes, asciende dirección por ella manteniendo la dirección que llevamos y que nos va acercando a la parte izquierda del circo que ya vemos sobre nosotros (si nos deja la niebla, en este caso lo intuimos, aunque como ya hemos estado más veces sabemos lo que hay).

Ojo a los hitos que se van a nuestra derecha, en general se dirigirán, por un punto u otro, al Pico del Alba (subida por los ibones del Alba descrita aquí), pico que cierra el circo por la derecha y mucho más transitado que los picos de la zona izquierda (Muela, Diente, Mir...). Nosotros tomamos como referencia la Punta Delmás, que cierra el circo por la izquierda, y seguimos los hitos que nos van acercando a sus desplomes.

Tras cruzar un nuevo barranco a nuestra izquierda por bloques, continuamos ascendiendo por canchales (Sur) hasta dar con la evidente morrena (bloques, piedra suelta) que superamos para acceder, ya con el Collado del Alba claramente frente a nosotros, a una zona de escasa pendiente llena de grandes bloques.
,
Pico de Paderna.
Por el centro del valle, frente a nosotros, baja el arroyo que sirve de referencia. El sendero sigue el arroyo en su parte más baja para luego pasarse a la zona verde del centro de la foto, por donde sube con tendencia hacia la izquierda hasta llegar al escalón rocoso, donde gira a la derecha. En la derecha de la foto, las palas que bajan del Pico de Paderna.
Subiendo. Al fondo a la izquierda se ve brillar el agua en el Plan de Paderna y en el Ibón de la Renclusa.  En el centro de la foto, el caos de roca que desciende desde la Maladeta, que habremos cruzado por su parte más baja.
La niebla apenas nos deja ver el collado del Alba. La Punta Delmás nos sirve de guía (a la izquierda del centro de la foto). Seguimos los hitos que entre canchales, hierba y más arriba, caos de bloques, nos acercan a sus desplomes.
Ascendemos por canchales acercándonos al marcado frente de la morrena (centro de la foto). A la izquierda, la Punta Delmás.
A nuestra derecha, al otro lado del circo, el Pico del Alba.
Con el Collado del Alba a la vista, brecha de la izquierda de la foto.
Recorremos la zona de bloques, de baja pendiente y con algún nevero, acercándonos al nevero, éste si de mucha pendiente. que nos conduce al Collado del Alba (crampones) justo con la muralla que forman Delmás y Mir a nuestra izquierda. Este nevero de acceso al collado nos lo hemos encontrado, con mayor o menor tamaño, todos los agostos que nos hemos acercado por aquí y sin crampones no me atrevería a afrontarlo.

A la derecha del collado otro collado, también muy deshecho y pendiente, nos da acceso entre el Diente y la Muela. hace unos años nos metimos por ahí, desde mi punto de vista, una opción mucho peor.

Este año el nevero nos deja cerca del collado, así que recorremos los últimos metros de empinada subida por terreno deshecho, buscando hacia la pared del Mir la zona más transitable que nos deja en el Collado del Alba (3.081 m; 3 h 45 min).

Desde el Collado del Alba, mirando la morrena, el nevero y el último trozo de roca suelta que acabamos de superar.
Pasamos al otro lado. A nuestra derecha (oeste), siguiendo la cresta, Muela y Diente del Alba. No nos acercamos, pero es desde luego una opción, ya que estarán solo a unos 200 o 250 metros.

Pero en este caso miramos a nuestra izquierda. Siguiendo el espolón que baja del Sayo veremos un collado, Collado Cordier, y a continuación un resalte, es el Pico Le Bondidier. Nos dirigimos flanqueando por bloques hacia el collado, al que accedemos por una evidente vira que nos va sirviendo de referencia según nos acercamos. En la vira vemos rastro de senda, pero no hemos visto hitos en el flanqueo pero por suerte la niebla ha ido subiendo según ascendíamos, así que ahora, con las nubes altas, el camino hasta el collado es más que evidente. Llegamos al Collado Cordier (3.121 m; 4 h) y dejemos las mochilas, la cima está cerca y mejor sin peso para andar por la roca.

Muela y Diente del Alba, desde el Collado del Alba
Al  frente, algo a nuestra derecha, el Collado Cordier y el resalte del Pico Bondidier. Flanquearemos por los bloques, intentando no perder cota, hasta el collado.
Sobre nosotros, a nuestras derecha, el Pico Mir, casi fuera a la derecha de la foto, y el Pico Sayó.
Acercándonos al collado, la vira de acceso se hace más evidente.

Collado Cordier, miramos al sur y ahí esta la corta cresta que nos va a conducir al Bondidier.

Nos dirigimos por el nevero del collado hacia la cresta. Enseguida hay que empezar a poner las manos. Como la caída importante está hacia la izquierda, vamos avanzando más hacia el lado derecho pero manteniéndonos en el filo, salvando los bloques con algunos hitos de referencia y con algún paso de I+ o II-  hasta llegar al primer hito cimero, que corresponde al Pico Le Bondidier Norte (3.153 m; 4 h 10 min).

Después de este pico nos encontramos un corte así que descendemos hacia nuestra derecha, donde una vira marcada con hitos nos permite salvar la brecha para volver a ascender hacia la cresta que tras una nueva y corta trepada (se mantiene el I+ o  el II-) nos deja en al cima del Pico Le Bondidier (3.181 m; 4h 25 min).

Supongo que en un día despejado, eso dicen las guías, es un magnífico mirador sobre la cara sur de las Maladetas y sobre Cregüeña, pero hoy no es ese día.

Primeras trepadas hacia la cresta.
Vistas hacia nuestra izquierda. La caída impresiona, así que nos vamos algo hacia la derecha.
Una de las trepadas, el buen granito ayuda.
Hito en la cima del Le Bondidier Norte, con el Sayó tras él.
Bajamos unos metros para encontrar la vira (hitos) que nos permite salvar la brecha.

Pero enseguida vuelve la arista y la trepada.
Mirada atrás (Norte), al Le Bondidier Norte, según vamos avanzando. Al fondo, Mir y Sayó, e incluso, a la izquierda, el collado del Alba.
Y frente a nosotros, el último esfuerzo, la cima del Pico Le Bondidier.
Le Bondidier, pequeño hito cimero, pero no hay duda, es aquí ya que inmediatamente la cresta comienza a perder altura.
Desde la cima, collado del Alba, y el Diente, la Muela y el Pico del Alba.
Desde la cima, Le Bondidier N y la brecha entre ambos. Al fondo, Mir y Sayó.

Perdidas entre las nubes, las Maladetas.
Para la vuelta, seguimos los hitos de la vira para no tener que subir al Bondidier N, hitos que nos dejarán en el collado Cordier y desde ahí, ya solo queda desandar el camino hasta la Besurta.