Páginas

miércoles, 30 de septiembre de 2020

Ferrata de la Zapatilla (27-08-2020)

Cuando me lié con esto del blog, lo veía enfocado a senderismo y ascensiones, al senderismo y tipo de ascensiones que hacía en el momento que lo inicié, no a otras variantes que con el tiempo he ido probando (esquí de travesía, ferratas…) y que por aquel entonces ni me planteaba. Así que suelo ser reacio a subir descripciones de ferratas.

Pero visto que en los trekings por Dolomitas (La U dolomítica y el Giro del Catinaccio) ya llevo descritas unas cuantas ascensiones con ferratas, no veo mal incluir una más, la ferrata de la Zapatilla, menos exótica que las italianas por ser mucho más cercana pero que nos permite subir sin problema a la Zapatilla, un referente para todos los que conocemos Candanchú.

La Zapatilla. Vamos a alcanzar la pared subiendo por el cono del Tubo de la Zapatilla, cruzaremos hacia la derecha por la línea verde-marrón debajo de la suela y, tras acceder a la suela por una chimenea que desde aquí no se ve, volveremos a cruzar la suela hacia la izquierda y de ahí a la cima. 
Y casi dudo de llamarla ferrata. Probablemente el concepto que manejan en Dolomitas de “sendero equipado” sea más exacto en este caso donde, además del siempre presente cable de seguridad, en todo el recorrido solo encontraremos dos grapas y una cadena. Realmente no necesita más, ya que es una ferrata fácil, aunque eso sí, muy entretenida.   

Fecha: 27-08-2020
Distancia: 6 km 
Desnivel positivo: 693 m
Duración (con paradas): 3 45 min
Dificultad: Ferrata fácil. Necesario equipo de ferrata (arnés, disipador, casco...)
Track en wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-via-ferrata/2020-08-27-ferrata-zapatilla-55667606

Dejamos el coche al fondo del Parking de la estación de Candanchú. Salimos del siguiendo la pista de la Rinconada. En un día despejado tendremos a la vista la Zapatilla y simplemente se trata de llegar a la base del tubo de la Zapatilla, un cono de deyección más que evidente, destacando por su color marrón, a la izquierda de la “suela” de la Zapatilla. Nosotros abandonamos la pista y acortamos por los prados (Noroeste) hasta llegar a un llano antes de empezar la subida en serio. Una fuente y un memorial en lo alto de una roca marcan este punto. 

Salimos del parking y ya tenemos a la vista la inconfundible Zapatilla.

Llegamos al Memorial. Aquí comenzará la subida.

Superado este punto comenzamos la subida en serio. Primero por una zona de hierba (rastro de senda) que da paso a la pedrera que ya veíamos de lejos. A principio se intuyen algunos zig-zags que intentamos seguir, pero según ascendemos acercándonos al tubo, la pedrera se vuelve de las horrible (empinada, piedra fina y suelta muy deslizante…) donde ni los rastros de paso ayudan a ascender.

Comenzamos bien la subida. Incluso encontramos rastros de senda...pero nos durará poco.

Los buitres andan por ahí...ni se preocupan por nosotros.

Y alcanzamos el cono de deyección del Tubo de la Zapatilla, y empieza el sufrimiento.

Rocas y tierra que se van según las miras. De lo peorcito que recuerdo, aunque afortunadamente es poco tramo.
Ayudándonos de los bastones o casi a cuatro patas llegamos al inicio de la ferrata (1.900m, 1 h). Una placa nos recuerda la primera ascensión por esta vía y la necesidad de equipo. Nos lo colocamos y nos enganchamos al cable iniciando la ascensión por la ferrata.

Llegamos al inicio. Junto a la pared y bajo el primer diedro nos ponemos el equipo.

Placa. Nuestro agradecimiento a los que la abrieron y a los equipadores. 

El primer tramo es vertical, a ascendiendo justo donde se produce el cambio de roca. Al ser una especie de chimenea o diedro con muchas presas, el ascenso es relativamente sencillo. Tras este tramo la pendiente decrece e iniciamos un flanqueo con una buena caída a nuestra derecha. Superado este tramo recorremos un tramo en el límite entre la caliza y una zona de hierba, por el que prácticamente avanzamos andando, aunque siempre enganchados al cable.

Primera subida. 

Es vertical, pero se sube bien gracias a que hay muchos agarres.

Y aunque vamos cogiendo altura, en general no hay sensación de exposición por ser bastante cerrada. 

Aunque en algún paso, tras superar el diedro, el patio se precie más.

Superada la chimenea seguimos flanqueando...

...siguiendo por el límite bajo la caliza de la suela.

Giramos ahora a nuestra izquierda, ascendiendo por la caliza, por unas acanaladuras. La caliza, con su buena adherencia, nos da tranquilidad y nos permite avanzar sin problema. 

Ascendemos hacia nuestra izquierda adentrándonos en la caliza. 

La caliza se ve lisa... 

...pero realmente presenta muchas acanaladuras y la adherencia es total. 

Y aunque en la foto parece expuesto, es solo cuestión de encuadre, realmente no es para tanto. 
Tras unos pocos metros salimos al prado y de momento desaparece el cable. Desde aquí ya vemos el escalón que habremos de superar para acceder a la “suela”, pero primero habrá que recorrer el prado (Oeste) siguiendo los hitos hasta llegar a una nueva pedrera, donde giramos hacia nuestra izquierda, hacia la chimenea, oculta en su parte superior, que nos permitirá superar el escalón. Vista la anterior, la pedrera asusta, pero ésta es mucho más corta y cómoda, lo que supone todo un alivio.

Salimos al prado...

...y nos dirigimos, siguiendo los hitos que avanzan por el prado y ascienden una nueva pedrera, hacia el lateral de la suela.

En el centro de la foto tenemos a chimenea que nos permitirá acceder a la suela. Nos dirigimos por la pedrera, muy cómoda comparada con la primera, hacia ella. 

En el inicio de la chimenea vuelve a aparecer el cable de seguridad. Además, una cadena nos puede ayudar a superar un primer muro justo al abandonar la pedrera, aunque nosotros no la vimos necesaria. Superado este muro encontramos un par de tramos de chimenea que van cerrándose según ascendemos dejándonos en una pequeña cueva. Justo donde acaba la chimenea, por encima de ella y sin que se vean desde abajo, encontraremos dos grapas que nos ayudarán a superarla, alcanzando un rellano en la “cueva”. Habrán sido unos 20 o 25 metros de ascensión.

Chimenea,...

...y un plano de la cadena y el cable en su inicio.

Alguno de los animalitos de los que nos esperan cuidando la chimenea.

Primer tramo, visto desde arriba. Vertical sin duda.
Y aquí ya lo salvamos. 

Segundo tramo de la chimenea. Se aprecia como se estrecha al final.

La chimenea nos introducirá en una pequeña cueva. 

Salida de la chimenea. Es estrecha y la mochila puede llegar a molestar. Un par de grapas a cada lado de la salida (en la foto se aprecia a la izquierda del cable) nos ayudan a superar esta dificultad.  

¡¡¡Último esfuerzo y listo!!!. 
Salimos de ella por la abertura que da a la suela, apareciendo en su zona derecha, y volvemos a encontrar el cable de seguridad que nos lleva ahora a ascender por un nuevo canalizo calizo y al igual que antes, con una roca muy adherente que facilita la progresión. En seguida, y ahora ya andando y prácticamente por sendero, aunque siempre fijados al cable, cruzaremos la suela hacia nuestra izquierda para afrontar los últimos metros de subida, de nuevo por caliza, que nos dejarán en la cima norte de la Zapatilla (2.218 m; 2 h 5 min). 

Salimos de la cueva a la suela.

Y según salimos retomamos el cable y ascendemos directos. Estamos en el lado derecho de la suela

De nuevo avanzamos por las acanaladuras en la caliza. En algún punto buscaremos agarres para las manos, pero es una zona muy sencilla, algo tumbada y sin exposición.

Ya bastante arriba cruzaremos la suela en diagonal.

Hay incluso un sendero marcado en algunos puntos y, aunque el cable se mantiene, este tramo se hace andando.

Ya hemos lleagdo a lado izquierdo de la suela. Toca remontar directos, pero ya queda muy poco.

Salimos a la antecima. A nuestra espalda Candanchú y y al fondo el Midi.

Nos quedamos en esta primera antecima, el monton de piedra caliza justo en primer plano de la foto. Al fondo, en un segundo plano, nuestro querido Aspe.

Vistas desde la cima. En este caso, la zona del Sombrero y el Pico Lecherines.

Disfrutamos un momento de las vistas y continuamos por la cresta unos 25 o 30 metros. A nuestra izquierda reaparece el cable, que desciende hacia el Este, hacia el collado del inicio del Tubo de la Zapatilla. Al principio descendemos por un sendero muy empinado y también muy marcado en la tierra, que pronto da paso a una zona de roca marrón. Un par de destrepes fáciles siguiendo el sendero nos conducen a una cornisa en descenso. Su única dificultad, además de la visión del patio a nuestra derecha, es un punto en el que se estrecha y donde la pared te tira algo hacia afuera. Con la seguridad del cable, presente en toda la bajada, superamos este punto y llegamos al collado de entrada al Tubo (2.125; 2 h 30 min). 

Iniciamos el descenso. El cable no permite que te equivoques de camino.

Primero bajamos por zona de prado y tierra muy pendiente, con el rastro de paso muy marcado por la erosión. A nuestros pies ya tenemos el collado donde se inicia el Tubo de la Zapatilla. Hacia él nos dirigimos.

Unos bloques, donde habrá que usar las manos para descenderlos, nos conducen a una cornisa en descenso.

Cornisa. Lo peor puede ser el punto en que se estrecha, con patio a la derecha, y con una cierta panza en la pared. Lo pasamos como podemos y se acabó la ferrata.

Tras quitarnos en este punto el equipo de ferrata y aprovechar para comer algo, toca volver al aparcamiento. Descendemos para ello hacia nuestra derecha (Sur), no hacia el Tubo, dirigiéndonos luego al este, para llegar al Puerto de Tortiellas (1.975 m; 3 h). Aquí tomamos en descenso, dirección Noreste, la pista del paso de Tortiellas. Superada la parte de mayor pendiente de la pista y, al llegar a un cambio de dirección seguimos (Norte) por un evidente sendero en la ladera de nuestra derecha hasta que de nuevo aparece frente a nosotros el aparcamiento, continuando por los prados hasta llegar a él. 

Flanqueamos hacia el Puerto de Tortiellas.

Puerto de Tortiellas. Inicio de la pista de esquí.

Descendemos por la Pista y luego flanquearemos, siguiendo un sendero, a media ladera el contrafuerte que se ve en segundo plano de la foto, medio en sombra, hasta salvarlo por su parte inferior girando ahí hacia el aparcamiento, que ya tendremos a la vista.

Nuestro adios por ahora, con estas vistas de postal, a la Zapatilla

En total nos han salido algo menos de 4 horas, unos 6 kilómetros y 700 metros de desnivel. Una mañanera entretenida y diferente.