lunes, 23 de julio de 2018

Punta Escarra, por el Ibón de Ip (07-10-2017)

Punta Escarra es de esas montañas que tiene su “puntito”. Llegar a su pared por Ip es fácil, largo pero fácil. El barranco de Ip y las vistas del Collarada, por si solos, ya justifican la excursión. 
Vistas desde la cima. Destaca el Collarada, referencia montañera obligada en la zona.

Y luego, en los últimos metros de ascensión nos vemos obligados a trepar. Y sabido es que tenemos predilección por esas montañas que nos obligan a poner las manos pero que para nuestro nivel no son difíciles, más bien disfrutonas, y esta es de esas. Así que aunque ya hemos estado, no nos importa volver.
En el centro, vista desde la zona del Collarada, la pirámide de Punta Escarra. Siempre dan ganas de subir a montes con esa figura.
Fecha: 07-10-2017
Montañeros: 2
Distancia: 18,3 km
Desnivel (positivo y negativo): 1.748 m
Duración (con paradas): 8 h
Dificultad: Moderada. Trepada ¿II? para acceder a la vira que da acceso a la pala final. Pala final formada por estrechas y aéreas terracitas (I).
IBP Index: 205
Track en Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-alpinismo/punta-escarra-07-10-2017-20159063

Justo pasado Canfranc (pueblo), en dirección a Francia, nos encontramos a la derecha un puente, Puente de los Peregrinos, sobre el río Aragón y un parking de hierba al otro lado. Dejamos ahí el
coche y comenzamos a andar por la pista que asciende hacia el norte, paralela al río.
Tomamos la pista. La luz de la mañana, sombra más bien, y mi impericia como fotógrafo impiden que la foto haga justicia a los colores del otoño.
Nos mantenemos en la pista dejando a un lado el sendero que va hacia Canfranc Estación (poste indicador). Llegados al barranco de Ip la pista se convierte en sendero, lo cruza y gira a nuestra derecha (Este) pasando por debajo de un puente del ferrocarril y comenzando la ascensión por el bosque. Algunas zetas al principio y luego seguimos ascendiendo de forma más suave, siempre paralelos al arroyo que va quedando a nuestra derecha.
Puente que marca el cambio de sentido...

...y el barranco que salva. Arriba se aprecia el puente del ferrocarril.

Pasando bajo el puente del ferrocarril.
Toca subir por el bosque, por un marcado sendero, siempre con el barranco a nuestra derecha.

Encontramos un desvío, siguiendo en nuestro caso por la derecha, aunque según el mapa ambos acabarían en el mismo sitio. El desvío nos conduce a unas cerradas zetas por el bosque con las que ganamos altura rápidamente. Según se acaban las zetas el bosque se va abriendo dando paso a una faja despejada por la que cruzamos un torrente (impresiona el barranco visto desde aquí) saliendo inmediatamente al prado.
Desvío. Abandonamos el sendero que sube más directo y tomamos a la derecha, al inicio con menos pendiente lo que nos permite un respiro.

Aunque después vuelve a ganar pendiente, salvando parte de la pendiente en cortas zetas.
El bosque empieza a clarear y la luz de la mañana se cuela entre los árboles.

Cruzamos un par de torrentes, secos o casi secos. A nuestra derecha la caída impresiona, afortunadamente el camino es amplio.

En el prado nos encontramos un marcado sendero que avanza en dirección Este ganando cota de forma muy suave. Pasamos junto al refugio de la Canal de Ip (1.875 m; 1 h 30 min) y seguimos manteniendo dirección. Tras cruzar la depresión de un nuevo torrente salimos a la parte baja del pantano de Ip. Dejamos a nuestra derecha el refugio y las pistas que van hacia el frente de la presa y nos dirigimos por el prado (hitos y rastro de senda), ascendiendo por la cuenca de un torrente hacia el Este, pasando cerca de una gran y distintiva torre de hormigón que quedará a nuestra izquierda.
Salimos al prado.

Y ya que salimos a zona despejada aprovechamos para mirar a nuestra espalda. Al fondo, el valle del Aragón del que venimos y asomando apenas en la foto, en la zona derecha del horizonte, otro de los inconfundibles, los Mallos de Lecherines.

Nos acercamos al refugio en el frente del ibón de Ip. No llegaremos a él.
Las miradas se van a nuestra derecha, a las paredes de la zona de los Campanales.

Dejamos a nuestra izquierda la torre de hormigón y seguimos avanzando por el valle a la izquierda del ibón.

Según vamos ascendiendo disfrutamos de las vistas: circo de Ip.
 Tras salir a una zona llana, con apariencia de ibón colmatado, el sendero gira a nuestra izquierda (Noreste) ascendiendo en nuestro caso siguiendo una torrentera seca para acabar en la entrada (2.275 m; 3 h) del pequeño circo que forman la Pala de Ip, Punta Escarra y el Pico Hombro de Escarra.
Nos dirigimos siguiendo más o menos la torrentera seca del centro de la foto hacia la entrada del circo que forman Pala de Ip, Punta Escarra y el Pico Hombro de Escarra. El terreno permite avanzar por casi cualquier sitio, así que hay hitos y rastro de senda por varios sitios.

Otra panorámica del circo de Ip. Ahora ya hemos ganado altura suficiente y podemos ver el Ibón de Ip.

Ascendiendo por la torrentera, ya en sus metros finales.
Cruzamos el seco torrente y avanzamos por senda paralelos al mismo (Nornoreste) para, ya con la pared de Punta Escarra a la vista, girar a nuestra derecha (Este) y ascender por pedreras (hitos) hasta el collado en la cresta a la izquierda de la puntiaguda Punta Escarra.
Descendemos unos metros para cruzar un nuevo torrente (hitos)...

...y nos internamos en el circo.

Como tampoco hay tanto hito por esta zona, la referencia será la puntiaguda Punta Escarra y esa especie de collado en el centro de la foto a su izquierda.
Al principio avanzamos por terreno pedregoso pero fácil.

Pero según nos vamos acercando aparecen las pedrera y alguna zona de bloques.

Otra posible referencia. El "picacho" a la izquierda del collado con su esbelta aguja.

En el collado paramos. Como siempre que salimos de una “olla”, donde solo ves bloques y pedreras, nos sorprenden las vistas: los tonos rojizos del Anayet, la mole del Midi tras ellos, allá lejos el Balaitus casi tapado por el Arriel…
Llegamos a la arista...

El Midi d'Ossau nos saluda. Delante de él, el Anayet pone los tonos rojos.

Tras el collado seguimos el sendero, ahora muy marcado en la pedrera, que al inicio asciende hacia la muralla de Punta Escarra paralelo a la cresta para luego irse hacia la derecha, hacia un punto en el que la muralla parece tumbarse hacia la izquierda y permitir el acceso por una chimenea.
Comenzamos a subir por la pedrera. En la zona media de la foto se aprecia la muralla que hemos de salvar y como parece perder altura hacia la derecha.

Y hacia ese punto donde la muralla se inclina nos dirigimos. Visto de lejos no es evidente, pero uno de los marcados senderos nos lleva hasta allí.

Mientras subimos, que la pendiente es importante, no viene mal un descanso para disfrutar de las vistas.

La chimenea es una corta trepada, escalonada pero con su punto aéreo (II?), por buena roca. De la trepada salimos hacia la izquierda, ascendiendo por una amplia cornisa y retomando de nuevo la zona de la cresta. Un estrecho y aéreo senderito nos pasa a la otra vertiente de la cresta, la cara norte.
Chimenea, el paso clave para nosotros. Buena roca, pero son unos cuantos metros de altura...

...que vistos desde arriba impresionan más.

Trepamos (¿II?)...
...y salimos a una amplia cornisa que seguimos hacia nuestra izquierda.
La cornisa nos lleva a un corto y estrecho senderito que nos deja en la cara Norte.

Nos encontramos una primera placa vertical que superamos, usando las manos, pegados a las rocas que se elevan unos pocos metros a nuestra derecha y buscamos los hitos en una cornisa que se va a unos pocos metros a nuestra izquierda. De aquí, por estrechas y verticales terracitas, vamos ascendiendo siguiendo los hitos teniendo que emplear las manos en algunos puntos hasta alcanzar las cercanías de la cima. De ahí, apenas unos metros por bloques a la cima de Punta Escarra (2.751 m; 4 h).
Primera placa vertical. Algo tendida y con pared a la derecha que ayuda a subir.
Vista desde arriba, la ladera Norte que acabamos de superar. No se puede negar que es empinada.

Punta Escarra y su hito cimero. Al fondo, la zona de Infiernos, Garmo, Algas, Argualas...
Estamos en octubre pero el día está precioso, despejado y sin una nube. Disfrutamos de la cima para nosotros solos, de las vistas a nuestro alrededor (Pala de Ip, Hombro de Escarra, Campanales de Ip, Collaradeta, Collarada, Anayet, Midi, Peña Telera y toda la sierra de la Partacua…).
Panorámica desde la cima. Peña Telera a la izquierda, el valle de Acumuer y su ibón, Pala Bucuesa, Campanales de Ip, Collaradeta, Collarada...
Y abusando del zoom: Midi de Ossau...


...y la pared Este de la Pala de Ip.

Y no me  resisto a una más del Collarada.
El descenso lo hacemos por el mismo camino, destrepes incluidos, hasta el frente del embalse de Ip. A la altura del refugio, junto a una gran roca a su izquierda según bajamos (cartel indicador), cruzamos el arroyo. Hemos subido por la orilla orográfica derecha, pero vamos a bajar por la izquierda, por la Besera.
Desandamos el camino y nos dirigimos hacia le refugio en la base del ibón.

En una gran roca nos encontramos el indicador.

Indicador. A partir de aquí seguimos las marcas blancas y amarillas.
El sendero desciende paralelo al arroyo, está balizado (marcas blancas y amarillas) y en su mayor parte está sobradamente marcado en el terreno, aunque en el inicio a veces la senda se difumina en el prado o entre las rocas. En cualquier caso, siguiendo las balizas y avanzando paralelos al arroyo no habrá pérdida.  Sobre nosotros, a nuestra izquierda, las paredes verticales de la zona del Collarada.

Cruzamos el barranco...aquí apenas un paso.

De nuevo las miradas se nos van a las paredes de la zona del Collarada y los Campanales.
Tanto miramos a nuestra izquierda, que aveces se nos olvida mirar al frente. Frente a nosotros, al otro lado del valle, los Mallos de Lecherines, el Pico de la Garganta de Borau y el Sombrero

Y seguimos mirando a nuestra izquierda, donde la luz sigue jugando con los Campanales.
En esta zona el sendero es evidente, aunque con tanto mirar a nuestra izquierda es cierto que nos despistamos.
El arroyo poco a poco se va hundiendo, y de repente nos damos cuenta de que está ahí, muy abajo. El sendero se acercará en algunos puntos a los cortados sobre el arroyo y nos proporcionará unas magníficas vistas de los paredones al otro lado y del sendero que hemos recorrido a la mañana. Incluso, ya que estamos en otoño, nos permitirá disfrutar de los primeros colores de la temporada.
El profundo Barranco de Ip nos separa del camino recorrido a la mañana.

Al otoño todavía le faltaba un punto, aunque los colores ya empezaban a cambiar.
Finalmente, el sendero se internará en el bosque (pinos, zonas de boj) descendiendo paralelos al arroyo. Ya, excepto en algún claro, no abandonaremos el bosque hasta salir unos metros más arriba del parking donde hemos dejado el coche a la mañana.  Al final se nos han ido 8 horas, pero sin duda ha merecido la pena volver a la entretenida Punta Escarra.
Sendero, evidente, por el bosque.

En uno de los claros nos encontramos esta construcción cupular. Bastante bien conservada merece la pena desviarse el par de metros necesarios para echarle un vistazo.

Bosque y boj. Se agradece la sombra aunque estemos en octubre.
Y se acabó por hoy. Llegamos al parking.



La aguda zona central del perfil del día dice bastante de lo que es acceder a esta cima.